En España, veintisiete millones y medio de personas leen libros, al menos una vez por semana, en su tiempo libre
Metro Bilbao, ocho de la mañana, entra una mujer joven. En su chaqueta, una insignia de la Universidad del País Vasco y, en sus manos, un ejemplar de ‘El tiempo entre costuras’ de María Dueñas. Ella representa el prototipo del lector español según el ‘Barómetro de hábitos de lectura y compra de libros 2010’ de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE). El informe revela datos interesantes como que más de la mitad de los españoles, un 57%, lee en su tiempo libre.
Pero los jóvenes no leen en sus ratos de ocio. La mayoría de encuestados entre los 14 y los 25 años admite que no le gusta leer o no le interesa y en caso de hacerlo es por motivos escolares o laborales. El portavoz de la FGEE, Gerardo Miguel, cuenta que «los gremios autonómicos realizan campañas de concienciación de la lectura». De hecho, llevan «diez años trabajando en potenciar el interés de los libros en los jóvenes como, por ejemplo, actividades paralelas con la Vuelta ciclista a España en los finales de etapa». Aunque el representante de los gremios indica que «afortunadamente» el índice de lectura en niños menores de 14 años es del 100%.
Las principales consumidoras de este tipo de cultura son las mujeres, puesto que hay más estudiantes universitarias que varones y esta categoría, a su vez, representa el grupo más numeroso de lectores. Sandra prepara su acceso a la universidad a distancia, quiere estudiar Psicología y aprovecha los momentos de respiro en su jornada laboral para leer. «Me gustan los libros sobre la mente humana y el comportamiento, leo para aprender», admite mientras ojea un grueso volumen de comunicación no verbal, «aprovecho para leer en el trabajo porque en casa me da pereza». La media de libros leídos al año por persona está entre 9 y 10. «Es más o menos mi caso, han sido unos ocho, debo de ser muy ‘mediana’» dice Sandra al enterarse del dato.
Itxaso Fernández trabaja en una librería en Getxo y afirma que «el último libro de Haruki Murakami, ‘1Q84’, se está vendiendo muy bien, la gente empieza a conocer a este extraño autor». En la última edición de ‘Territorios’, el suplemento cultural de ‘El Correo’, la obra japonesa estaba en el tercer puesto de libros más comprados. «Eduardo Mendoza y Vargas Llosa también tienen mucho tirón, como la novela negra escandinava» añade la librera. La tendencia es leer autores españoles y en castellano porque, según Itxaso, «hay pocos libros en euskera y se venden menos, la gente está habituada a leer en castellano».
Es curioso ver, por ejemplo, que el metro no es uno de los lugares más utilizados para leer (11,8%). Los españoles prefieren leer en la comodidad de su hogar, lejos del barullo callejero. Gerardo Miguel apostilla «Hay que avanzar mucho, leer es esencial para la cultura». Cultura al alza, por lo que se ve entre los menores de 14 años. Por ahora la lectura está, y en el futuro, se la espera.