Últimamente cuando voy a poner a escribir pienso «¿sonará esto como si fuese uno de los Señores Cabreados™?». Me suelo responder que no, todavía soy joven para ello. «¿Y si realmente suena así? ¿Estás preparado para entrar en el umbral del Señor Cabreado™?». Todavía no, la verdad. Nuestras quejas van por caminos distintos… Aunque lo sigo pensando. Seguramente con el tiempo acabe así. Espero que mis quejas no sean similares a las suyas, porque habrán ganado. Hoy quería venir a hablar de ‘Game of Thrones’ la serie de éxito de HBO que estrena su séptima temporada en menos de dos semanas.
Como supongo que sabréis, muchas de las escenas de esta temporada se han rodado en España. No es la primera vez, desde hace un par de años eligieron la piel de toro para imaginar distintos paisajes del universo de Canción de hielo y fuego y han decidido volver por múltiples razones. Al menos a muchos sitios, porque a Euskadi no quieren acercarse demasiado. Aquí rodaron varias escenas de la séptima temporada. En Barrika y en Zumaia. La experiencia no ha sido muy satisfactoria para la productora de la serie por diversos motivos. Este artículo de Aloñe Fernández en El Confidencial lo explica muy bien.
Básicamente se subieron a la parra a la hora de pedir dinero para la ocupación de terrenos para grabar (o funciones auxiliares), el precio de la seguridad para impedir el acceso a curiosos también fue alto y, mi favorita, los medios de comunicación locales se dedicaron a reventar todo lo que pudieron. Provincianos que somos.
Decía que mi favorita es la relación con los medios de comunicación locales porque durante el rodaje en octubre-noviembre era imposible no ver algo al respecto de la serie cada vez que entrabas a leer las noticias comarcales en la web o en el periódico en papel en los kioscos o bares. Me atrevería a decir que ya conozco un poco por dónde van a ir los tiros esta temporada gracias a las borrosas fotos que sacaron y pusieron en portada a tres columnas web o los titulares que escribieron. También saber qué actores estaban en la zona ayudó a romper un poco la magia e incertidumbre respecto a la nueva temporada.
Tanta exposición mediática no ha gustado a la productora que, incluso, decidió no rodar ciertas escenas que tenían planeadas en Euskadi para evitar que se filtrasen. Acabaron muy molestos y han decidido no repetir en esta maravillosa comarca. Una auténtica pena, máxime cuando el turismo es una de las actividades importantes a nivel económico de la región. La exposición mediática que da una serie tan seguida como Game of Thrones es difícil de conseguir y se ha tirado por la borda por, literalmente, cuatro perras. Intentar dar el pelotazo con el alquiler de terrenos por una parte y conseguir más clics para frenar la sangría publicitaria de cpm por otra.
Tengo ganas de ver qué pasa en la serie y qué se muestra de Euskadi en ella. También me alegro que no vuelvan a rodar aquí. A ver si aprendemos algo de esto y dejamos de ser tan tocacojones. Nos gusta mucho Euskadi, nos gusta mostrarlo a la gente que viene de fuera, pero luego conseguimos un poquito de atención y parecemos gilimonguers con tanta chorrada hasta que los espantamos. Así nos va.