Con todo el mundo estresado, malhumorado, de los pelos, con ganas de gritar, chillar, matar, destruir y demás sinónimos de cosas divertidas de ver y no padecer, yo estoy más fresco que una lechuga (mis símiles con frescas no van muy bien, me vienen a la mente las palabras esquina, mujer, sexo y dinero). No sé si será apatía, desgana o pasotismo, pero ahora mismo estoy super tranquilo, como si me encontrara en una nube, pero no de felicidad, una nube de tranquilidad. No se me pasa nada por la cabeza, no tengo ganas de nada más que de sentarme en casa y no hacer nada, pero no hacer nada me aburre y tengo que hacer algo, lo cual no tengo ganas con lo que me quedo sentado y me aburro.
Todavía me queda un examen para ser libre del todo, la verdad es que no tengo ganas de hacerlo, aunque una persona lo compensa todo, ni por esas tengo ganas de subir a la uni, cuando antes me moría por hacerlo.
Quizás sea que el curso está acabando (estoy a solo 2 horas de acabar definitivamente 1º) y ya estoy cansado, pero la verdad es que este es el mejor año académico de mi vida. Siempre he dicho con mis amigos que 3º y 4º de la ESO habían sido los mejores cursos del colegio, ahora si me preguntasen, respondería sin dudarlo que 1º de carrera. La razón es sencilla: he conocido a gente encantadora. A estas alturas de curso (acabando) otros años estaba muy quemado, este año en cambio llego super bien, muy fresco y lo afronto con ganas y decisión, creo que la elección de coger turno de tarde es una de las mejores que he tomado en mi vida.
Lo peor de este curso que termina, a mi juicio, es la desigualdad y la injusticia de esta carrera. Hay gente (concretamente dos mujeres geniales) que se ha estado currando el curso, los trabajos y los exámenes y no han conseguido buenos resultados, cuando un servidor tomando copas bajo las palmeras ha cosechado buenas notas. Si el karma existiese debería de venir a hacerme una visita, porque me debe muchas cosas malas y a gente muchas buenas.
Sólo un examen para poder amargarme a gusto, sólamente uno…
No estés triste. Aída te manda alegría. Muak
Vale, hoy que estoy más despierta, vuelvo a leerte… vuelvo a leer mi comentario… Y tengo que decir algo con más sentido. Mira, no seas pesimista, son etapas. Mañana te despertarás, pensarás que no es todo tan malo y te tomarás un helado. Que sea a mi salud.
Besos!